Once Upon a Time...


Si la historia se pudiera tomar y reescribir, con la facilidad del lapiz, papel y borrador, tal vez Hitler no hubiese visto la necesidad de preservar la raza aria, Van Gogh hubiese sido un reconocido artista con exposiciones en New York, Frida Kahlo hubiese tenido un excelente fisiatra que le hubiese aliviado sus dolores, Oscar Wilde fuese el vocero de la LGBT, Alemania nunca se hubiese visto separada por el muro de Berlín, aún conserváramos las 8 maravillas del mundo intactas, Venezuela hubiese ido a un mundial, Ana Frank hubiese sido mecanógrafa, Benedetti no hubiese muerto este año, Dalí haría arte digital hoy en día, ya hubiesemos revivido a Walt Disney, Stanley Kubrick hubiese llegado a dirigir A.I., Cortázar aún buscaría a su Maga por la Rue Saint-Jacques o la Rue de Seine y nosotros no tendríamos a Chávez como presidente, sino a Jesús Soto y un país con una infraestructura bellísima.

Ahora bien, viene Quentin Tarantino, se lee unos dos libros de Historia Europea, el Mein Kampf, se ve un montón de películas de la Segunda Guerra Mundial y dice "Esta historia me aburre", entonces decide reescribir un hecho histórico que todos conocemos pero a su manera particular porque le aburrió y está en todo su derecho. A mí personalmente me parece que hay muchos capítulos de la historia que son, si bien, no aburridos, bastante flojos o faltos de acción: a mi me hubiese encantado que Simón Bolívar hubiese muerto en plena batalla y a caballo, o que la vida de María Antoinette fuera como el mundo que le creó Sofia Coppola donde sonaba New Order y I Want Candy en medio de un festín Pantone, con Converse, de paso.

Obvio fui a ver Inglorious Basterds como todo ser humano con un mínimo de buen gusto y cultura general, obvio que la amé, estuve ansioso los 153 minutos que dura (de los cuales he de recalcar que no tiene ni uno de más), me dolía el cuello y la cabeza de tanto halarme el cuello de la chaqueta por la expectativa de que en cualquier momento alguien sacaba una pistola y he de tener unos tres más aneurismas a punto de estallar. Cuando Tarantino culminó Kill Bill Vol. 2 y anunció su próximos proyectos, etre ellos, su visión de la Segunda Guerra Mundial, me dije "Bah una Saving Private Ryan más, no puede ser" sin embargo me negué a que Tarantino hiciera algo así y empezó la espera, estuve pegado a imdb.com cada cierto tiempo a ver que adelantaban, de manera que me enteré como se fue formando el reparto, cuando estaba en pre - pro y post - producción, hace una semana la vi al fin, fue la ida al cine que más he disfrutado, sobre todo por la reacción de la persona que tenía al lado, cuyas palabras fueron mi mejor souvenir "Gracias por enseñarme de buen cine".

Eso fue hace dos semanas, son tantas cosas que he tenido en mente con Inglorious Basterds que he escrito y reescrito este post desde ese día, al final no me gusta y empiezo de nuevo, así que trataré de ser metódico:

-Amo cuando se mezclan cosas como el cine y la literatura, el leit motif que tienen Tarantino y Von Trier con relatar sus historias en capítulos siempre me pone una sonrisa que mezcla la satisfacción y la complicidad.
-Creo que Stanislavski describió la actuación como un "juego", resulta curioso como los actores parecieran participar aquí en un juego que, de paso, disfrutan. Puedo imaginar a Tarantino construyendo los personajes junto con los actores y ahogándose en risa de manera morbosa, especialmente los del "Bear Jew" a cargo del también director Eli Roth y el de Brad Pitt, quien por cierto, es opacado considerablemente por Shosanna Dreyfuss y el Coronel Hans Landa.
-Todos odiamos a Hans Landa y nos enamoramos de Shosanna Dreyfuss. El primero a cargo del alemán Christoph Waltz nos hizo sentir perseguidos e interrogados, la segunda impecablemente en manos de la francesa Melanie Laurent, iluminaba la pantalla con cada gesto, y esa es la clave de una actuación magistral: los pequeños detalles en la gestualidad. Cabe acotar que Laurent, por si fuera poco, también es escritora y directora nominada a la Palma de Oro por su cortometraje De moins en moins.
-No sé si ustedes también lo noten pero Tarantino se orina en todos los parámetros del cine y en la audiencia, jugando con nosotros a su gusto, de manera que una película de Guerra es contada a la manera de un Spaguetti Western con tonos de comic y serie de super heroes sesentosas. Amo que sea un iconoclasta, al séptimo arte le hacía falta refrescarse, así fuera con orines y la Nouvelle Vague fue, en los sesenta, me oyes Godard?
-A veces me fastidia hablar de aspectos técnicos, es que siento que decir "La dirección de arte está muy bien cuidada", "La fotografía es excelente", "La estética es hermosa" ya suena como cliché, sólo me queda recordarles que en primer lugar Tarantino cuenta con Sally Menke en la edición una vez más y que DIOS MIO este hombre es un perfeccionista, la gente que trabaja con él por algo será.

>>> WARNING: Here Be Spoilers <<< (No continúe, a menos que haya visto la película) Ya dije que esta película trataba sobre "reescribir la historia universal" y el núcleo de esto se da en el capítulo final "Revenge of the Giant Face", donde una judía con un hombre de color queman un cine minado de alemanes, mientras otros dos masacran a la Créme Reich, ametrallando la cara de Hitler inclusive, entonces: -DIOS MIO queman el cine utilizando películas de 35mm como inflamante, el cine como un arma. -CRISTO es una judía que hace una película especialmente para que vean los alemanes mientras mueren, proclamando la "venganza judía" mientrás la cámara en posición de contrapicado la exalta. -CIELO BENDITO los alemanes daban especial importancia a su propaganda, hasta un Ministerio para eso tenían a cargo de Goebbels, y Tarantino primero llena el auditorio de esvásticas para que veamos como una a una van cayendo y consumiéndose en el fuego. -POR LOS CLAVOS DE CRISTO cuando muere Shosanna, la luz cenital, la posición de su cuerpo con lo cabeza hacia atrás, sin ver su cara, sólo el cuerpo, la posición casi de ballet, el humo (o plumas como tú lo viste), la película atrás proyectándose, el movimiento de la cámara que no era precisamente una cámara lenta sino a la velocidad idónea, la música, TODO!

Podría seguir hablando y dando detalles, es más, podría desfragmentar la película completa pero Inglorious Basterds me trae demasiados recuerdos. Sólo me quedan dos cosas:

1-En su escrito "Las Ménades" Julio Cortázar propone una audiencia que exaltada, desenfrenada y poseída por su admiración se come a una orquesta y su director después de un concierto, Tarantino propone un cine consumiendo a una audiencia, el arte matando al espectador, el espectador despavorido porque el realismo de la obra es tal que lo quema (literalmente), fuego proveniente de fotogramas, el arte mortal. Ahí tienes Platón, tu que decías que el arte era la copia de la realidad y el mundo de las ideas, trata de categorizar esta película en algún género.

2-Al terminar de verla quería verla dos veces más, ahora siento que no puedo, no podría verla sin que mi mente me trajera demasiados recuerdos y buscaría en la butaca de al lado, esos ojos que no podían creer lo que veían y me quedaría esperando ese salto durante el quinto capítulo, o esperaría que alguien me susurrara al oído su "Gracias por enseñarme de buen cine", creo que me quedé con las ganas de enseñarte más, creo que al igual que los nazis, la película también nos consumió, creo entonces que algún arte si es mortal, creo que para mí nos quedaremos en esa sala de cine siempre, viendo siempre la misma película, viendo las plumas caer mientras muere Shosanna.

Feliz Cumpleaños Udo Kier.


Udo Kier es Alemán.
Tiene un nombre de sólo tres letras, cosa que amo, porque mis hijas tendrán sólo nombres de tres letras, todas.
Nació durante la Segunda Guerra Mundial y sobrevivió de milagro: su madre pidió que la dejaran un tiempo extra con su recién nacido, las enfermeras recogieron al resto de los bebés y los llevaron a la enfermería, en ese momento el hospital fue bombardeado, todos los demás bebés murieron, excepto él, que estaba en brazos de su madre.
Rey del cine clase B.
Pasó por los cines Grindhouse.
Colega de colmillos de Bela Lugosi.
Trabajó con Andy Warhol y Paul Morrissey en The Factory, y de paso se besó con Joe D'Alessandro.
Apareció en el libro Sex de Madonna, en el video de Deeper and Deeper, junto con Sofia Coppola y Debi Mazar y en el de Erotica.
Apareció en el video de Make me bad de Korn, junto con Brigitte Nielsen.
Es uno de los Leit Motiv de Lars Von Trier y de paso está filmando Dimension con él, que es una película filmada en 30 años, en la cual cada año se va filmando un pedazo, de modo que cuando la estrenen en el 2024 los actores hayan envejecido en tiempo real, y para completar es padrino de Agnes Von Trier.
Trabajó en My Own Private Idaho de Gus Van Sant, junto con Keanu Reeves y el prematuramente desaparecido River Phoenix, probablemente hayan hecho una orgía entre los cuatro.
Es amigo de Nina Hagen, allá en los 80 cuando el punk era PUNK.
Colaborador del movimiento Queer.
Los ojos más gélidos del cine.

Feliz Cumpleaños Udo eres el hombre postmo por excelencia.




Hewolf Amodóvar.


Acabo de ver Los Abrazos Rotos de Almodóvar y:

1-No es la mejor película del manchego pero es bastante divertida, capaz hasta un Oscar le dan.
2-Es un tributo que hace Almodóvar, a sí mismo y al cine, a los personajes de sus películas, a sus mujeres.
3-Para verla y entenderla tiene que conocerse la filmografía del director, o al menos lo básico: toda la etapa ochentosa de Almodóvar, especialmente Mujeres al borde de un ataque de nervios, y otras como Kika, Átame, Todo Sobre Mi Madre y Hable con Ella.
4-Los que vieron el corto La Concejala Antropófaga amarán que sea parte de la película.
5-Geniales las apariciones de Rossy de Palma y Chus Lampreave, las extrañaba
6-Es como si hiciera un gazpacho con sus películas, las recortara y uniera unas con otras, como la hermosísima escena de los trozos de fotos de Mateo y Lena esparcidos en toda una mesa, haciendo una especie de collage fotográfico.
7-Hay un halo de nostalgia durante toda la película.
8-La mejor escena de toda la película es la del director ciego tocando la pantalla del televisor.con él y Penélope dándose un beso en still.
9-Almodóvar, por si no se habían dado cuenta, es vouyerista.
10-Casi lloro al escuchar Werewolf de Cat Power a mitad de la película.

In the room where you sleep.



AMO! AMO cuando un artista da un salto de una rama del arte a otra.
AMO la música oscura, y por eso amo cosas como Dead Can Dance, Cocteau Twins y Azure Ray.
AMO las cosas con una estética entre infantil y retorcida, por eso amaba cosas como Eerie India, ¿Le temes a la oscuridad? y Escalofríos.
AMO cuando descubro algo y no puedo dejar de escucharlo o verlo.
AMO que me sorprendan.
AMO a Canadá.
AMO a Ryan Gosling, y me sorprendió lo talentoso que es y la voz de catarro a lo Tom Waits que tiene.
Por todo eso AMO a Dead Man's Bones.

[Click click en lo purpúreo]

This is not Hollywood.


Robert Rodríguez es un tipo cool, ha sabido sobreponerse a las exigencias de Hollywood, siendo complaciente con la meca para sacarle provecho y ejecutar sus proyectos personales.
Rodríguez estudió en la Universidad de Texas, escribió su primer guión mientras estaba internado como paciente de un experimento químico remunerado, con dicho dinero rodó su primera película con un ínfimo presupuesto "El Mariachi" fue realizada con tan sólo 7.000 dólares y luego le hizo la versión Hollywoodense "Desperado", la cual fue un éxito taquillero, llevando al estrellato a Salma Hayek y Antonio Banderas, por igual.
A partir de esto Rodríguez ha desarrollado un esquema laboral bastante ambivalente, en su filmografía cuenta con películas que obedecen a las exigencias comerciales, películas con un amplio presupuesto, apadrinadas por los principales estidios cinematográficos y con una temática principalmente de acción o infantiles: de aquí se desprenden títulos como The Faculty, Spy Kids (con sus secuelas) y las secuelas de Desperado (la cual terminó siendo una trilogía), dándole el éxito comercial, y el dinero, como para costearse y darse el gusto de hacer sus producciones menos comerciales y con mayor libertad intelectual, joyas como Sin City (junto con Frank Miller)o la insurrecta Planet Terror (parte de Grindhouse, junto con Quentin Tarantino) la cual tenía como finalidad rendir tributo a las películas de corte B, con errores de edición y de continuidad a propósito. Mostrando así la visión fresca y única de Rodríguez.

Steven Soderbergh es otro que juega a su gusto con el cine comercial y el independiente. Su educación fue mayoritariamente empírica, grabando cortos en 16mm y trabajando como editor, hasta que tuvo la oportunidad de dirigir el video sobre el concierto de la agrupación Yes "9012 Live".
Luego rodó Sex, Lies & Videotape, la cuál gozó del éxito, tanto de la crítica, la academia, así como la del público. La filmografía de Soderbergh es bastante ecléctica, éxitos de taquilla como Erin Brockovich, Traffic y Ocean's Eleven, Twelve y Thirteen, Nineteen. Y por otra parte películas alternativas y difíciles de digerir como Bubble, Full Frontal, Schizopolis, hasta la criticada Ché, películas cuya presencia en las taquillas ha pasado casi desapercibida o incluso nula, algunas parecieran el trabajo de un director independiente y no del ganador del Oscar por Traffic.

Estos dos nombres son muestra de que es posible sobrevivir dentro del mundo del cine, teniendo la cantidad necesaria de complacencia y rebeldía, si Hollywood es considerado por algunos el enemigo de la emancipación intelectual cinematográfica, pues al amigo hay que tenerlo cerca y al enemigo más cerca aún.



Alex Produkt.





Al principio vi estos dos videos y planeaba hacer un post titulado "Encuentre las 10 diferencias".
Luego investigando me di cuenta que los había hecho la misma persona.
Alex McLean, mejor conocido como Alex Produkt es un artista canadiense.
Patrick Watson y Lhasa de Sela son canadienses también.
A pesar de que los americanos siempre los menosprecien, los canadienses parecieran tener mejor gusto, aunque tengan una fijación con el stop motion.

Sinbad Richardson.



Sinbad Richardson es un artista del video que vive en Montreal.
Lo acabo de conocer por esos vericuetos del youtube.
Hizo un video hermoso de Miracle Fortress que me da ganas de ser niño de nuevo.
Yo quiero dirigir videos musicales.
El canal de Sinbad AQUÍ!

Ignorance is Bliss.


En un post anterior hablaba de como me resultaba más difícil sorprenderme a medida que pasa el tiempo, que voy leyendo, escuchando, palpando, mirando arte. Es una posición bastante nostálgica a decir verdad, a veces me encuentro rememorando como antes no podía divisar la línea imaginaria entre la realidad y la obra de arte, ahora esa línea es una persiana que puedo abrir y cerrar a mi antojo, y lamentablemente, mi curiosidad es demasiado morbosa, por lo cual, pasa la mayor parte del tiempo, abierta.

Recuerdo que antes la relación con una obra era mucho más simple, "o me gusta, o no me gusta", era mucho más factible que me gustara, imagino que estaba más ávido de información y a la vez no manejaba ciertos códigos estéticos y estilismos, solía vivir felizmente en mi ignorancia y el único precio que tenía que pagar por eso era, el asombro.

Cuando yo era niño amaba a Sinead O'Connor porque era calva, me parecía un símbolo máximo de rebeldía, no sabía el trasfondo social ni religioso que había detrás de sus canciones y sus conciertos, amaba que cantara una balada llorando y que fuera calva, por esa simple razón. Ahora la amo aún más, pero sé que tuvo miles de relaciones fallidas, que era una niña problema, unos dos abortos, se peleó con la iglesia católica (rompió en televisión nacional americana una foto del papa), luego se metió a sacerdotisa pero se salió porque no podía con el celibato, después se reconcilió de nuevo con la religión y hasta sacó un disco de salmos, odió la canción que la hizo mundialmente famosa y al que la compuso (Prince), lo cual me hizo amarla más porque yo ODIO a Prince y me parece que jamás debió grabar un disco. Entonces ahora que conozco todo el entorno socio-cultural de la irlandesa en cuestión puedo entender el por que me gusta y cada vez me gusta más, a pesar de que el mainstream la haya olvidado, aunque a ella no le importe, y a mí me importe mucho menos.

Hay casos opuestos, por ejemplo, yo antes disfrutaba mucho más ir al cine, para mí era un encuentro mágico, era ir a ver por un huequito la vida y perspectiva de alguien (el personaje principal, por así decirlo), si veía un drama lloraba a mares esa noche en mi cama antes de dormirme, si era una película de acción saliá pensando que era un héroe y que, en cierta forma, era partícipe de la historia de la película, sí la película era sobre una catástrofe mundial, salía con miedo de la sala, pensando que el mundo se acababa esa misma noche o que era muy probable que un meteorito chocara con nosotros o que hubiesen tornados en San Antonio del Táchira. Ahora, en cambio, estoy atento de todos los aspectos técnicos, que si la dirección de arte está muy bien lograda, o que la fotografía es hermosa, que si el vestuario es adecuado y refleja las características de la época o el personaje y la película termina siendo para mí eso...una película, con un grupo de gente detrás de ella que se encargaba de esto o aquello y sobre todo, detrás de ella hay un GUIÓN, nada de lo que pasó ante mis ojos es real; afortunadamente soy hiper sensible y al menos aún lloro.

Ingresé en la Escuela de Artes después que vi Dancer in the Dark de Lars Von Trier, al salir del cine me dije "Ahora sabes lo que debes estudiar, porque las matemáticas no se te dan, tu eres de placeres estéticos Israel". Hace poco la volví a ver como por enésima vez, aún la amo, siempre la amaré y le estaré agradecido pero le conseguí uno que otro error en las escenas de baile, me dí cuenta que una de las canciones me parece hiper cursi y recordé que en una de las películas de Von Trier se veía un boom, y que en esta de seguro había uno pero bien escondidito del cuadro focal.

Ahora, ocho años después, sé que Björk y Lars Von Trier se odiaron, que incluso ella se escapó durante tres días del rodaje porque no podía con la forma en que era tratada, que Catherine Deneuve no soportaba las peleas entre ellos, que originalmente el papel de Deneuve estaba pensado para una afroamericana, y sobre todo, que Von Trier tuvo una etapa de bloqueo, en la que no le salía nada para escribir porque estaba deprimido y, en cierta forma, decepcionado del cine, en otras palabras, es un ser humano.

Todo eso hace que ame más a Dancer in the Dark, sólo que ya no me como el cuento de que Selma Jezkova fue ahorcada por haber prometido guardar hasta la muerte el secreto de su amigo. Para bien o para mal, el conocer el contexto de una obra te abre un mundo de posibilidades cognitivas, aunque el precio que cobre sea la pérdida de la "magia".

Como diría Sinead:

"Don't you ever lie to me again
because if you do
I will not be you friend"